Toda picada de procesionaria necesita de cuidado cuando se produce y sobre todo si proviene de animales que no conocemos. Las condiciones de la picadura siempre dependerán de cada individuo.
Sin embargo, existen síntomas comunes que se presentan y que son fáciles de detectar. Independientemente de las condiciones, siempre debemos acudir a un médico al sufrir cualquier tipo de accidente. Así pues, existen varias pomadas para curar picaduras de este tipo.
Las picaduras de las orugas
Es preciso que todos conozcamos cómo son las orugas y conocer que existen distintos tipos de las mismas. Las cuales representan un peligro claro cuando se entra en contacto con alguna de ellas. Sin importar que haya sido intencional o simplemente un accidente. Lo que sí es claro es que mientras más colores tengan estos pequeños animales, más peligrosas son.
En el mundo natural, cuando los animales poseen colores brillantes es mucho más potente su veneno. Por lo que identificarlos es sumamente importante. En el caso de las orugas, estas se encuentran ubicadas en las copas de los árboles. Allí se encuentran sus nidos, los cuales son de colores blanquecinos.
Las orugas representan una peligrosidad para el árbol en sí y para las personas que se aproximan a estos. Incluso pueden afectar a nuestras mascotas, provocando serios síntomas y padecimientos. De los más comunes, la urticaria o problemas respiratorios. Es muy sencillo identificar sus nidos, están cubiertos como de una seda blanquecina. Y lo ideal es que sean removidos por personas especializadas en el tema.
Reacciones más frecuentes a las picadas de orugas
De la reacción más común se encuentra la dermatitis, el cuerpo se puede llenar de ampollas y causar dolor. Así mismo, cuando se tiene contacto con las orugas de forma más cercana, sobre todo al área de la vista. Se puede producir una conjuntivitis aguda y realmente dolorosa.
Una de las reacciones que más se asocia a las picadura de la oruga procesionaria se encuentra la urticaria. Causando síntomas tan molestos como nauseas, vómitos y dolores de cabeza. Incluso produce deficiencias en las vías respiratorias, inflamándolas y causando dificultad para respirar.
Así mismo, una de las consecuencias de la picada de este animal se evidencia en una forma de artritis. Algunas personas pudiesen llegar a padecer insuficiencia renal. Cabe aclarar que la picadura de este animal no produce la muerte. Pero si síntomas bastante delicados que si no son atendidos se podrían complicar.
Pomadas para curar picaduras de procesionaria: tratamientos más comunes
En primer lugar, es importante tener en cuenta que se debe asistir al especialista o urgencias de inmediato. Se pueden consumir calmantes para el dolor y la inflamación, así como, la aplicación de compresas frías en la zona. Incluso se puede elevar la zona en donde se encuentre la picada para disminuir la hinchazón.
En caso de que la persona sufra de alergias, cuanto antes debe asistir a urgencias. Ya que normalmente este tipo de personas reaccionan de forma más rápida a una picadura de este tipo. Si la picada se inflama con más intensidad debe ser atendida con prontitud. Es preciso conocer el tipo de oruga con la que se tuvo contacto y conocer sus características. Ya que muchos de los síntomas dependerán de la misma.
Uno de los usos más comunes son las cremas tópicas para el alivio de esta picada, lo que llamamos las pomadas. Podemos encontrar aquellas con hidrocortisona, la cual podrá suavizar la zona. Esta debe ser colocada según las instrucciones del empaque. De igual manera podemos utilizar las pomadas con antihistamínico. Que a pesar de que muchos aseguran que no tiene un efecto considerable sobre las picaduras de oruga. Podría funcionar perfectamente y ser realmente efectiva.
Lo más importante es atender la picadura y no dejarla pasar. Ya que las reacciones posteriores son las de mayor cuidado, sobre todo cuando se trata de una oruga peligrosa. Y ya sabes que existen varias pomadas para curar picaduras de procesionaria.